La facturación es una de las partes más importantes del trabajo diario de cualquier pequeña empresa y autónomo. Es por este motivo por el que muy probablemente no quieras realizar ningún error a la hora de hacer y enviar tus facturas.
Lamentablemente no siempre es el caso, y crear facturas, sobre todo cuando tienes que hacer una gran cantidad, pueden hacer que cometas errores que pueden ser evitados.
A continuación te contamos cuáles son los principales errores que puedes cometer qué hacer para remediarlos.
- No crear facturas profesionales: cada factura debe llevar tu logo, tu información de contacto y si tienes, la dirección de tu página web. Puedes personalizar todas tus facturas incluyendo algún elemento significativo de tu empresa como el logo en la parte superior o en el pie de la misma. Usa lenguaje profesional y sobre todo, si optas por la facturación electrónica, elige un programa que te permita hacer todas estas customizaciones.
- No sólo envíes una factura con una cantidad, incluye por ejemplo una carta que le recuerde a tu cliente por lo que está pagando. No siempre es posible que recuerden el acuerdo al que llegaron contigo, así que es mejor prevenir. Envíales una factura detallada que vaya acompañada con una carta en la detalles por lo que deben pagarte.
- No te olvides de revisar la ortografía y gramática. Si quieres hacer facturas profesionales no te olvides de revisarlas para asegurarte de que no te has comido una letra o existe un error tipográfico. No sólo no quedarás bien a ojos de tu cliente, sino que, imagínate que el error está en la cantidad que tu cliente debe pagarte o que la factura no queda del todo clara. ¿No querrás que un ingreso se retrase por un error de redacción, verdad?
- Tan importante es facturar como hacer un seguimiento del pago de las facturas. Si has enviado la factura (ya sea electrónica o en papel) y el ingreso no llega envía un mail o llama por teléfono hasta que consigas averiguar el motivo del retraso en el pago. Las medidas que debas tomar dependerán de las razones de que te den pero siempre es mejor que intentes facilitar a tus clientes el pago.
- Mandar la factura a la persona equivocada. Es quizás el peor error de todos. Comprueba varias veces el contacto antes de enviar un mail con una factura que no es la que toca. No sólo es algo que te avergonzará de cara a tu cliente, puede incluso generar un problema legal si, sin quererlo, desvelas información privada o confidencial sobre uno de tus clientes.
Sigue estos sencillos consejos y ya verás cómo los problemas que puedas tener con la facturación se reducen considerablemente.
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