Desde la irrupción de la crisis han surgido muchas corrientes alabando la conveniencia de emprender. Sin embargo, no todo lo que reluce es oro ni todo el mundo tiene la fortuna de triunfar con su negocio. El batacazo puede llevar a perder todo lo invertido en cuestión de meses. A continuación te damos una serie de motivos que posiblemente no te animen a hacerte emprendedor.
–8 de cada 10 startups fracasarán durante el primer año. Antes de que terminen estos doce meses algo más de un 30% de los autónomos bajan la persiana de su negocio de manera definitiva. No solamente hay un 80% de empresas que cierran en su primer año de vida, sino que el resto de emprendedores que continúan sólo la mitad de ellos podrán mantenerse abiertos a partir de los dos años.
-Necesitan mucho tiempo para conseguir relevancia: no basta con un par de años para que te conozcan y sepan como trabajas. La consolidación de un negocio puede necesitar entre 8 y 10 años. Así que ármate de paciencia y no arrojes la toalla tan fácil ante cualquier mal resultado.
-Prepárate para soportar malos momentos y en solitario: cuando tu negocio atraviesa por un buen momento, posiblemente llamarán a tu puerta inversores y socios nuevos, pero en las malas nadie te prestará atención. Ten en cuenta que la gente busca conseguir dinero con tu negocio, no perderlo.
-Perderlo todo: aseguran que hacerse emprendedor resulta muy asequible, pero en función del tipo de negocio posiblemente te veas obligado a depender de créditos y avales. En algunos casos, las deudas serán tan abultadas que incluso el autónomo podría perder su vivienda. –> Aquí tienes un listado de ayudas y subvenciones para autónomos.
-Trabajar más horas que nadie: los emprendedores que desempeñan una actividad profesional por su cuenta trabajan a la semana unos 45 horas de media, cuando un asalariado llega a las 36,5. En muchas ocasiones tampoco disfruta de descansos, fiestas o vacaciones.
Con todo esto, debes valorar si realmente te compensa emprender o no.