Los trabajadores por cuenta propia tienen el doble de posibilidades de sufrir una baja de larga duración por trastorno mental en comparación con otro tipo de empleados. Esto viene a demostrar de alguna manera la relación existente entre precariedad y salud. Así lo refleja un estudio realizado por el Hospital Universitario de Bellvitge. 
El Servicio de Psicología de este centro ha publicado en colaboración con el área de Salud Pública de la Universidad de Barcelona y de la mutua laboral Egarsat un informe en el que por primera vez se demuestra la existencia de una relación entre las malas condiciones laborales, debido a la crisis económica, y la duración de los problemas mentales de las personas que la sufren.
La responsable de este estudio, la doctora Eva Real, asegura que las bajas que se producen por estos trastornos no solo obedecen a motivos médicos, ya que también intervienen en ello factores sociolaborales y demográficos, que influyen de manera destaca en la duración de estas incapacidades temporales. En el caso de los autónomos, sus bajas se duplican en comparación al resto de profesionales.
Para la realización de este estudio se analizó a 7.112 trabajadores de la provincia de Barcelona que cogieron entre los años 2008 y 2012 una baja por trastorno mental. En torno al 40% permaneció apartado de sus obligaciones laborales durante un largo periodo de tiempo.
Pero no sólo son los autónomos los que cogen las bajas más largas, ya que también afectan a los profesionales con más de 50 años, los que cuentan con un contrato no consolidado, sufren trastorno mental grave o personas vinculadas a ámbitos como la construcción y el inmobiliario, que además cuentan con un importante número de trabajadores por cuenta propia.
Los profesionales creen que resulta necesario conocer los factores implicados en las bajas por trastorno mental, sobre todo por el incremento registrado en los países europeos durante los últimos años.
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