El próximo 6 de abril dará comienzo la campaña de la renta 2015, que se presenta con bastantes novedades. Para que los trabajadores autónomos puedan afrontarla sin grandes sobresaltos, a continuación te recordamos algunas de las modificaciones.
- Menos ventajas para los planes de pensiones: muchos autónomos recurren a los planes privados de pensiones para completar su pensión pública. Las novedades más importantes es que se rebaja la cantidad límite a aportar, que irá de los 10.000 a los 8.000 euros y en cuanto al rescate del plan en forma de capital, la reforma puso fin a la reducción del 40% al recuperarlo en forma de dinero.
- Reducciones por rendimiento del trabajo y despido: en la declaración de este año se suprime la reducción general de 2.625 euros por obtención de rendimientos del trabajo. A modo de compensación se habilita un nuevo gasto deducible por valor de 2.000 euros en concepto de otros gastos. Los trabajadores discapacitados verán como se incrementa la cuantía de desgravación hasta los 3.500 y 7.750 euros, cuando antes las reducciones eran de 3.246 y 7.246 euros.
- También desaparece la reducción fiscal para los trabajadores mayores de 65 años que se encuentran en activo. Por su parte, se conserva la rebaja de 3.700 euros para las rentas netas del trabajo que no rebasen los 11.250 euros.
- Condiciones de deducción de los Planes de Ahorro 5: para fomentar el ahorro a largo plazo hay un nuestro instrumento como son los Planes de Ahorro 5, que cuentan con dos tipos bien diferenciados.: los seguros individuales a largo plazo y las cuentas individuales de ahorro. Para que haya una exención de los rendimientos positivos que generen es preciso permanecer como mínimo cinco años desde la primera aportación.
- Reducción por rendimientos irregulares y supresión de la exención por dividendos: el porcentaje de reducción por rendimientos originados en más de dos años o irregulares se rebajará del 40 al 30%. El límite de 300.000 euros para rendimientos del trabajo también acaba extendiéndose al resto de tipos de rendimientos (capital inmobiliario, mobiliario y actividades económicas). Se elimina también la exención de 1.500 euros anuales por dividendos y participaciones en beneficios.
- Impuestos negativos: se ponen en marcha ayudas sociales que devuelve una cantidad aunque no haya retenciones a favor de los autónomos, pensionistas, trabajadores o desempleados integrados en una familia numerosa o familiares discapacitados a su cargo.
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