La mitad de los contratos indefinidos de apoyo a emprendedores, en concreto el 50,9%, no rebasa el año de duración. Esta figura se creó en 2012 con la reforma laboral. En el caso de la contratación indefinida ordinaria, el 62% de los contratos sí que se prolongan más allá del año.
Desde UGT instan al Gobierno a que retire este tipo de contrato porque favorece la “precariedad” del mercado laboral al permitir la implantación de un periodo de prueba de un año sin que haya una indemnización por despido al término del mismo.
Consideran que el periodo de prueba facilita que se use este modelo de contrato como sustituto de otro temporal y sin coste, siempre que la compañía no se acoja a bonificaciones ni a incentivos fiscales. En un comunicado, el sindicato explica que “los diferentes comportamientos entre este contrato y los indefinidos ordinarios desenmascaran la naturaleza temporal de una modalidad que quiere hacerse pasar por indefinida”.
Los contratos fijos de apoyo a emprendedores representan algo más del 15% de los contratos indefinidos, cuando en 2013 suponían apenas el 6,2%. Denuncian que este dato resulta preocupante porque se ha duplicado en apenas un par de años, gozando de un mayor peso entre las empresas a la hora de realizar las contrataciones.
Su utilización se ha visto incrementada en más del 38%, resultando uno de los principales responsables de los aumentos experimentados por la contratación indefinida. En la reforma laboral de 2012 se presentó como una de las figuras más importantes, pero el sindicato UGT lo define de fraude, aunque insistan en tacharlo de indefinido.
En apenas un año la utilización de este tipo de contrato ha crecido en un 38,2% y más del 96% de estos contratos no se ha acogido a incentivos fiscales, una prueba de que puede estar usándose de forma fraudulenta. Entienden que hay otras maneras de fidelizar el empleo fijo.