Los autónomos españoles cobran de media al mes unos 751 euros, una vez descontados gastos e impuestos, según la información que publica la Agencia Tributaria correspondiente al IRPF de 2014. Esto es una muestra más de la dureza con la que la crisis atacó a este colectivo, explica la Confederación Intersectorial de Autónomos del Estado Español (CIAE).
Cada aumentan más las diferencias entre los profesionales asalariados y los trabajadores por cuenta propia, en donde la brecha alcanza el 55%. Mientras que la renta media anual de los autónomos alcanza los 10.409 euros, los trabajadores por cuenta ajena llegan a los 18.873 euros.
Desde esta organización creen que aún no se puede hablar de recuperación ni de mejorías en la economía del país, o al menos eso es lo que se aprecia con estos resultados. Es cierto que cada vez hay más gente que decide hacerse autónoma y montar su propio negocio, pero no están encontrando el escenario más adecuado para consolidar sus proyectos económicos.
Una de las reivindicaciones que siempre realizan los autónomos es que aunque no tengan ingresos por un mal mes siempre tienen que afrontar las cuotas a la Seguridad Social, pagar el IRPF y realizar declaraciones del IVA al trimestre. También hay otro aspecto bastante preocupante y que ha mermado en algunos sectores el consumo como fue el incremento del IVA en ciertos productos y servicios. En muchas ocasiones no se ha podido repercutir en el precio por el que paga el consumidor.
Por su parte, el Informe Mundial de la Riqueza 2016 desvela que durante el año pasado se registró un crecimiento en el número de ricos en España. En concreto la subida fue de 15.000 personas, según el trabajo elaborado por la consultora internacional Capgemini. Puede servir para demostrar que este colectivo sí que ha conseguido superar la crisis y que no lo ha sufrido tanto como los autónomos.