El colectivo de los trabajadores por cuenta propia ha sido uno de los pocos que ha intentado sortear la crisis, algunos con más éxito que otros. El número de autónomos subió un 1,43% en 2014, según el análisis hecho por la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) basándose en los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).
En el último trimestre del pasado año había registrados 3.078.000 profesionales por cuenta propia, que suponían 43.000 más que a finales de 2013. El secretario general de UPTA, Sebastián Reyna, lo valora como un dato positivo, “aunque la evolución ha estado por debajo de la del sistema en general, que ha crecido en un 2,53% en el año”.
Dentro del colectivo de autónomos el comportamiento ha sido distinto variando en función de las características de los trabajadores. La mayor subida se registró como suele ser habitual entre los profesionales por cuenta propia sin asalariados, que crecieron en 43.500 trabajadores (2,10%). Hay que decir que algo más de dos tercios de los autónomos, en torno a los 2.062.800, no tienen a ningún empleado.
Por su parte, los autónomos con asalariados también aumentaron su presencia durante el 2014, aunque lo hicieron a un ritmo más moderado (1,56%), que se traduce en términos absolutos en 13.700 trabajadores más. Representan el 30% del total de autónomos, es decir, 892.900 profesionales.
Sin embargo el año 2014 deparó la caída de dos colectivos, como son los que se encuentran en régimen de ayuda familiar o autónomos colaboradores. Cayeron en 12.200 personas (11,12%), colocándose ahora en la cifra de 97.500 autónomos. Es la primera vez en los últimos ejercicios en los que cae esta cifra por debajo de los 100.000. También cae un 0,64% los socios cooperativistas, que alcanzan la cifra de 24.700 trabajadores.
Desde UPTA consideran que sería muy importante que aumentase de nuevo el número de autónomos con empleados, ya que serían magníficas noticias para la economía del país.