Preparar la declaración de la renta es uno de los momentos en los que los autónomos y contribuyentes comenten más errores y omisiones a la hora de hacer sus cuentas con el Hacienda. Lo cierto es que por un lado estos errores benefician a la administración pública ( ya sea por omisión de ciertas bonificaciones que reducen la factura fiscal del contribuyente) o bien porque se han cometido ciertos errores que acarrean multas y sanciones en caso de que sean detectados.
Entre los errores más comunes a la hora de presentar la declaración de la renta se encuentran:
- Los cambios en el estado civil, como por ejemplo el matrimonio, divorcios, defunciones o nacimientos. Deberás comprobar que Hacienda tiene tus datos actualizados a la hora de presentar tu declaración. Lo mismo ocurre si has tenido hijos, ya que puedes beneficiarte de las deducciones o beneficios tributarios.
- Las deducciones por adquisición de vivienda, especialmente en los casos en los que los datos del catastro no se corresponden con la realidad. (Por ejemplo, cuando la compra la realiza un matrimonio conjuntamente, y así firman la hipoteca, pero en el catastro solo aparece uno).
- Algunas ayudas y subvenciones públicas se consideran una ganancia patrimonial, y por ese motivo se debe tributar por ello. Es muy frecuente que no aparezcan en el borrador ni en los datos fiscales que envía Hacienda, por ello es importante revisarlo y subsanar cualquier error para evitar una multa en el futuro.
- Las deducciones por cancelación de un préstamo o por su ampliación.
- En el caso de que hayan existido, las daciones en pago.
- Las aportaciones a colegios profesionales, organizaciones sindicales o políticas así como las que no tienen ánimo de lucro.
Estos son los puntos más importantes, pero no son los únicos, porque por ejemplo, también cabe destacar la deducción por maternidad (que muchas mujeres trabajadoras no incluyen). Por ello, lo mejor que puedes hacer a la hora de hacer las cuentas anuales con la Administración es tener todos estos puntos claros.