El pleno de las Cortes rldó ayer, con los votos a favor del PP y en contra del PSOE, el desarrollo normativo de la Ley de Emprendedores, Autónomos y Pymes de Castilla-La Mancha, con la que el Ejecutivo quiere recuperar “la dignidad perdida año tras año” y conseguir la generación de empleo.
Así lo destacó la consejera de Empleo y Economía, Carmen Casero, en las dos intervenciones que tuvo durante el debate general –que concluyó con la aprobación de la resolución del PP de apoyo a esta norma–, donde resaltó que el decreto que desarrollará la ley “facilitará la conversión de un empleado en un emprendedor“.
Entre las nuevas medidas, que indicó , ahora abrir un negocio será “inmediato”, que la empresa pública Sodicaman contará con más de 8,3 millones de euros de fondos para “inyectarlos en la línea de flotación de los emprendedores” y que habrá más de 4,3 millones de euros para cubrir “más de 1.500 solicitudes de ayudas directas al año”, dinero que está “garantizado” con fondos propios y de la Conferencia Sectorial de Empleo.
También habló de las ayudas que se contemplan a través de tres líneas, una de las cuales prevé 2.000 euros para los autónomos para fomentar el autoempleo, a los que se podrán sumar mil euros más en el caso de menores de 30 años, mujeres que se autoempleen por primera vez o en un sector con poco índice femenino, y de otros 500 más si la persona tiene discapacidad.
Junto a ellas, habrá otras de 250 euros por semana para, en el marco de la conciliación de la vida laboral y personal, las personas desempleadas que sustituyan a una autónoma que se encuentre de baja por enfermedad y de otros mil euros para potenciar la figura del autónomo colaborador. A ellos se añadirá un tercer grupo que costeará el 75 por ciento del coste de los servicios de asistencia técnica, con un máximo de 2.000 euros.