La Sociedad Civil, una sencilla forma de asociación entre varias personas que cuentan con un proyecto común. A la hora de poner en marcha un proyecto empresarial cuentas con varias opciones interesantes. Es necesario conocerlas todas y barajar los pros y contras de las mismas. Junto con la comunidad de bienes, la sociedad civil es una opción por la que también optan muchos autónomos que se asocian con terceros.
¿Qué es una Sociedad Civil?
La Sociedad Civil es un contrato privado de colaboración entre dos o más partes. Personas que tienen la intención de realizar una actividad conjunta con ánimo de lucro.
En este contrato se debe especificar, entre otras cosas, lo que aporta cada uno; y es que en una Sociedad Civil se puede aportar trabajo, convirtiéndose así en “socio industrial”, o bien bienes o dinero, convirtiéndose esa parte en “socio capitalista”.
Es importante saber que aunque el término cuente con la palabra “sociedad”, en realidad la Sociedad Civil carece de personalidad jurídica propia, es decir, no es una sociedad mercantil. Actualmente la Sociedad Civil tributa a través del impuesto de sociedades y no por IRPF como lo hacían anteriormente.
Es una opción realmente interesante para aquellas personas que quieran montar un negocio pequeño en el que no se necesite demasiada inversión. Además, hay que reconocer que la gestión de una Sociedad Civil es mucho más sencilla.
Para constituir una sociedad civil es necesario que existan al menos dos socios. Todos ellos deberán especificar en el contrato privado de sociedad civil su aportación así como la actividad del negocio en sí. Asimismo, también será necesario dejar redactado y claro el porcentaje de participación, entre otras cosas.
- ¿Cómo constituir una sociedad civil?
- Diferencias entre una comunidad de bienes y una sociedad civil
- Ventajas y desventajas de las sociedades civiles