A estas alturas del año, has tenido tiempo de sobra de analizar los resultados del año pasado. Llega el momento de hacer balance, comprobar si hemos cumplido con los objetivos propuestos y analizar por qué no se han cumplido. No se trata de hurgar en la herida, sino de saber qué ha salido mal y buscar una solución para cumplir tus propósitos de año nuevo como autónomo. Igual que hablamos de tus objetivos profesionales de 2021, podemos hablar de los objetivos del semestre o incluso del trimestre. No hay que perder de vista nuestra evolución profesional.
Repaso de tus objetivos laborales del año anterior
En primer lugar, hay que buscar tus propósitos laborales del año anterior. Aumentar la cartera de clientes o tu facturación, reforzar la relación con los clientes, tener más tiempo para ti, tu familia o tus aficiones, planificar mejor, mejorar tu planificación financiera, trabajar tu salud física…
Son sólo ejemplos de los objetivos que nos podemos marcar. Si has cumplido con ellos, o al menos con la mayoría de ellos, ‘enhorabuena! Se puede decir que has tenido un 2021 exitoso. Pero si la mayoría están por cumplir o te has quedado lejos de tus metas, hay que analizar por qué no se cumplen los objetivos profesionales:
- Falta de esfuerzo: una de las razones que explican este fracaso puede ser la falta de esfuerzo. Antes de mirar otras causas, piensa si has gestionado bien el negocio, si has ofrecido el mejor producto, servicio o atención a tus clientes o si has dedicado todos tus esfuerzos. ¿No es así? Ahí está la clave del problema. Por delante tienes todo un año para revertir la situación, mejorar y cumplir tus metas.
- Eran poco realistas: un problema bastante frecuente es que nos establecemos metas imposibles de cumplir. Pensar a lo grande está bien, pero a la hora de marcarnos los objetivos hay que ser realistas y plantearnos metas factibles. De lo contrario, podemos desmotivarnos. Los objetivos imposibles son bastante frecuentes en autónomos que acaban de empezar.
- Factores externos: los autónomos no somos ajenos a lo que pasa a nuestro alrededor, y 2021 no ha sido un año fácil. Según el sector al que te dediques, puede que hayas tenido que hacer frente a restricciones derivadas de la pandemia. La subida de precios de la luz o el combustible también te pueden haber afectado, la llegada de nuevos competidores, la crisis de componentes… Cuando la economía global sufre, es fácil que tu negocio también lo haga. Eso sí, no son una excusa. Puede haber otros factores que influyan.
- Has tocado techo: llega un punto donde las empresas no pueden crecer más. Hemos llegado al límite de nuestra capacidad, y ya no podemos crecer más. En este contexto, es difícil cumplir con objetivos como vender más. La solución pasa por reformular el negocio ampliando nuestra cartera de productos o servicios y/o contratar a alguien que nos ayude, lo que debería permitirte vender más.
- Un modelo de negocio desfasado: otra opción es que no hayas sabido adaptarte a los nuevos tiempos y tu modelo de negocio o forma de trabajar hayan quedado desfasados. Es algo más común de lo que puedas pensar, y se puede digitalizar tu negocio, como en el caso anterior la solución pasa por replantear nuestro negocio. Precisamente este puede ser uno de tus objetivos para este año, volver a ser rentable.
Si eres capaz de identificar las causas por las que no cumpliste los objetivos profesionales como autónomo, te resultará mucho más fácil reformular los nuevos objetivos para 2022. En caso de haberlos cumplido todos, también debes analizar si no te pusiste metas demasiado fáciles. Igual que el exceso de optimismo puede resultar perjudicial, la falta de ambición puede ser un lastre. Si cumpliste tus objetivos en septiembre, tenemos que ser un poco más autoexigentes.