Existen ciertas actividades para las que es necesario el seguro de responsabilidad civil, como medida de seguridad tanto para la propia empresa, su cliente, como hacia sus trabajadores.
Tal y como cita el propio Código Civil, “el que por acción u omisión cause daños a otro, interviniendo culpa o negligencia, está obligado a reparar el daño causado“.
Ahí es donde radica la importancia de disponer de un seguro que pueda cubrir posibles daños derivados de la actividad empresarial o profesional, algo esencial en ciertos sectores de riesgo.
¿Es necesario tener el seguro de responsabilidad civil?
¿Cuándo es obligatorio el seguro de responsabilidad civil? ¿Para qué sectores resulta necesario contar con él? ¿Cualquier tipo de empresa necesita de un seguro así?
Pues bien, existen algunos sectores en los que contar con un seguro de responsabilidad civil se convierte en obligatorio, convirtiéndose en una especie de “seguro de vida para su negocio“.
No hay que olvidar que la negligencia o el error es algo real y posible, por lo que contar con herramientas para hacerle frente es imprescindible en el desarrollo de la actividad profesional. Por ello, los seguros para autónomos son esenciales para intentar cubrir cualquier imprevisto o accidente que se pueda producir en nuestra actividad.
La Administración es quien fija los supuestos en los que será obligatorio contar con el Seguro de Responsabilidad Civil. De forma que a la hora de iniciar la actividad será necesario que comprobar si existe obligatoriedad de disponerlo.
A continuación, destacamos algunos de los casos en los que es necesario tener seguro de responsabilidad civil. No obstante, la lista es extensa y de ahí la importancia de conocer si el tipo de servicio que se va a brindar está catalogado dentro de los obligatorios.
- Profesionales, personas jurídicas o entidades sanitarias en el ámbito privado
- Profesionales financieros y administradores concursales
- Corredores de seguros y abogados
- Técnicos y empresas dedicadas a la conservación de ascensores
- Actividades de espectáculos u ocio
- Complejos deportivos
- Empresas de restauración y hostelería
- Empresas de transporte colectivo público y escolar
- Agencias de viaje
- Espectáculos taurinos y pirotécnicos
En estos casos que acabamos de ver sí que es obligatorio tener un seguro de responsabilidad civil. Con ello, se busca cubrir el riesgo que conlleva la actividad frente a terceros. Cuanto mayor es el riesgo de una actividad, mayor debe ser la cura que se debe realizar para los trabajadores y terceros. Lo mismo pasa con los autónomos obligados a cotizar por contingencias profesionales, debido a la peligrosidad de su trabajo diariamente.