Las vacaciones de los autónomos son uno de los temas más complicados y que más controversia generan en el sector ya que un trabajo sin horarios es también un trabajo sin vacaciones fijas. Resulta complicado conciliar las tareas laborales con la vida familiar y a todo ello hay que sumarle la lucha con los clientes que pagan mal y tarde. Por eso tomarse un descanso puede ser algo imposible. Sin embargo, nosotros te detallamos cómo debe afrontar las vacaciones un autónomo, manteniendo clientes y proyectos.
Consejos para organizar las vacaciones si eres autónomo
Los autónomos tiene derecho a las vacaciones, sean remuneradas o no. Y es que los autónomos pueden cogerse vacaciones, no obstante, se trata de un grupo de profesionales que carece de un periodo vacacional acordado y remunerado.
Planea todo con anterioridad. Durante el periodo que te cojas de descanso recibirás llamadas de los clientes interesándose por sus trabajos así como unos cuantos emails al día. Tienes que hacerles entender que vas a estar disponible para las emergencias y que sus proyectos no están parados, solo se trata de una pequeña pausa. Recuerda que ser autónomo no es lo mismo que ser un esclavo y eso tienes que hacérselo entender a los clientes.
Reduce en la medida de lo posible los costes fijos tales como el ahorro en suministros. Y ahorra durante el año para compensar la falta de ingresos en vacaciones.
En cualquier caso, es imprescindible para afrontar las vacaciones de un autónomo revisar el correo o las llamadas 15 minutos al día por si acaso.
Una forma práctica de organizar tus vacaciones si eres autónomo es aprovechar el descanso de tus clientes para realizar escapadas o planificar tus vacaciones. Existen periodos con menor actividad, en función del sector puedes determinar cuáles son estos periodos y servirte para desconectar unos días del trabajo.
Intenta dejar atado todo lo que puedas, cierra todos los proyectos que tengas entre manos siempre que sea posible.
También existe la posibilidad de buscarte un sustituto durante el tiempo que vayas a estar de descanso. Siempre habrá algún compañero de profesión dispuesto a echarte una mano y a continuar con tus proyectos. Tus clientes entenderán esta incorporación.
Siempre que puedas intenta finalizar tus proyectos antes de irte de vacaciones. Tus clientes quedarán más satisfechos y tú podrás irte a la playa más tranquilo. De esta manera no tendrás en la cabeza los asuntos pendientes para la vuelta. Intenta que tu regreso después del descanso sea lo más suave posible. Incluso habiendo finalizado nuestros compromisos es posible que nos encontremos llena la bandeja de entrada del correo.
Lo importante de las vacaciones es desconectar, por eso no te lleves nunca el trabajo. Resulta muy complicado olvidarse de todo para un autónomo. Si no te queda otra opción lo mejor es que madrugues mucho para acabarlos cuanto antes y de esa manera disfrutar el resto del día en compañía de tu familia.