Dicen que las comparaciones son odiosas, pero de vez en cuando es imposible comparar la situación de los autónomos españoles con la de los trabajadores por cuenta propia de otros países. Muchas veces nos escandalizamos cuando vemos la típica comparativa de las cuotas de autónomos en varios países de nuestro entorno con las cuotas a las que hacemos frente en España, sin pararnos a pensar en si es cierto o no. ¿De verdad es oro todo lo que reluce o hay gato encerrado? Vamos a descubrir los mejores países para emprender como trabajador por cuenta propia.
Los mejores sitios para ser autónomo
Ser autónomo en el extranjero puede suponer una ventaja o no, existen diferentes sitios donde ser autónomo proporciona mayores beneficios que ser autónomo en España por sus condiciones y privilegios.
Los mejores países para ser autónomo están en Europa. Y si hiciésemos un pódium, Dinamarca es el mejor país para ser autónomo. Por una parte, el proceso de alta se hace online y no hay que pagar cuotas mensuales como en España. El pago de impuestos se realiza en base a las ganancias, aunque representa entre un 25 y un 50% de las mismas. Por otra parte, conviene destacar el alto nivel de vida de los países nórdicos. En Dinamarca, la educación es totalmente gratis y existen prestaciones para lanzar nuestro propio proyecto.
Otra opción muy interesante para trabajar como autónomo es el Reino Unido, aunque obviamente el Brexit le ha hecho perder cierto atractivo. Hay dos clases de autónomos, los que tienen ingresos entre 6.515 y 9.569 libras al año (clase 2) y quienes superan esta cifra (clase 4). Los primeros pagan 3,05 libras semanales como cuota, los segundos un 9% de sus ingresos. Y si no llegas a facturar 6.515 libras al año, no debes abonar ningún tipo de cuota, aunque pueden hacerlo voluntariamente. Además, en el Reino Unido podemos lanzar nuestro negocio en forma de SL sin necesidad de capital inicial.
Francia también es una buena opción y un gran sitio para ser autónomo, al menos para iniciar nuestro negocio. Los autónomos franceses están exentos del pago de cuotas los primeros 12 meses de actividad. Una vez consumido este primer año el negocio empieza a carburar, y los autónomos deberán abonar una cuota en base a sus ganancias. La Seguridad Social francesa tiene una calculadora para saber cuánto tendremos que pagar, y la cuota incluye asistencia sanitaria, jubilación, incapacidad temporal, invalidez o viudedad. Un autónomo que gana 2.300€ al mes pagará 297€, como un autónomo español.
¿Te acuerdas de la tarifa plana de 50€, que luego subió a 60€? Pues bien, los autónomos de Países Bajos abonan una cuota fija de 50€ cada mes. Eso sí, es una cifra trampa pues deben hacer frente a un seguro médico que se mueve en unos 100€. Es cierto que podemos agregar algún seguro o planes de pensiones, pero generalmente las cifras son sensiblemente inferiores a lo que pagan los autónomos en España. Podemos empezar pagando los 50€ y luego agregar el seguro o los extras.
No podemos pasar por alto un país como Portugal. Nuestros vecinos lusos tienen un sistema de cotización proporcional a los ingresos. Así, se calcula la media del 70% de ingresos de cada trimestre, y a esta cifra se aplica un 21,4%. El resultado es parecido al galo, pues ganando 6.000€ al trimestre -2.000€ al mes- se abonan 199,60€. Los autónomos sin ingresos deberán abonar una cuota mínima de 20€, y el tope está fijado en 1.138,14€. Además, el primer año no se paga lo que facilita la aparición de emprendedores.
¿Y qué pasa con el sueño americano? Ser autónomo en los Estados Unidos no es tan fácil como podríamos creer. Seguramente, lo más difícil sea conseguir un visado de trabajo para poder entrar en el país. Es cierto que no se pagan cuotas de autónomo, pero no tenemos derecho a sanidad o pensiones. El Gobierno Federal exige que los autónomos tengan seguro médico, y los impuestos se pagan en función de lo que producimos.