Si eres freelance y trabajas desde casa, o eres uno de los muchos autónomos que emprenden en solitario es fácil que te hayas topado con la soledad del autónomo. Es uno de los problemas que más se repiten entre los trabajadores por cuenta propia, en contraste con los colegas que trabajan por cuenta ajena en una oficina donde sienten el calor humano. Como todo en esta vida, ser autónomo tiene sus pros y sus contras y una de las desventajas es esta soledad del autónomo que cada vez afecta a más trabajadores.
Consejos para sobrevivir a la soledad del trabajador autónomo
La organización es clave para cualquier autónomo, pero además de permitirnos completar nuestras tareas y proyectos con éxito nos ayudará a combatir la soledad del autónomo. ¿Cómo? El hecho de estructurar coherentemente la jornada y seguir un horario regular nos permite disfrutar de tiempo para actividades de ocio, disfrutar de la familia y, en líneas generales, desconectar. Son actividades que se desarrollan acompañados, lo que nos evitará pasar tanto tiempo solos. También nos permite comentar aspectos del día a día con otra persona.
De hecho, buscar compañía siempre es un plus. Trabajar desde casa siendo autónomo puede conllevar la soledad, algo tan simple como comer acompañados nos ofrece la posibilidad de desconectar un rato con otra persona. Si eres capaz de fijar una o dos horas para comer, siempre puedes compartir plato con clientes, amigos, colegas freelance o la propia familia. Nos ayudará a aliviar tensiones. Algo parecido para con los after work. Cada vez es más popular ir a tomar algo con los compañeros de la oficina después de trabajar. ¿Por qué no hacerlo con la gente de tu entorno?
Otra de las tendencias de nuestra sociedad es el coworking. Son espacios donde podemos trabajar junto a otros freelance. Nos ofrecen unas facilidades que quizá en casa no tengamos, permiten establecer relación y sinergias con otros profesionales, etc. Y, lo más importante, nos permiten estar trabajando junto a otras personas. Probablemente sea lo más parecido al ambiente de oficina que puede encontrar un trabajador por cuenta propia. Y sí, también podemos aprovechar para comer o hacer un after work con los compañeros del coworking.
Mantener reuniones físicas con clientes, proveedores o colaboradores también nos ayuda a hacer frente a la soledad del autónomo. Es innegable que el teletrabajo está en auge, pero siempre que podamos intentaremos conservar esos encuentros cara a cara. El networking, la asistencia a eventos como foros o congresos nos permitirá superar temporalmente el aislamiento, acercándonos a otros profesionales a la vez que estamos al día de lo que pasa en el mercado. Lo mismo pasa con la formación: si hay que elegir entre presencial y online, la primera opción parece preferible.
Nuestra actitud hacia la jornada laboral también nos permitirá hacer frente a la soledad del autónomo. Por ejemplo, aunque trabajes desde casa sigue una rutina similar a la que seguirías si lo hicieses desde la oficina: dúchate, vístete… No hace falta estar 24/7 con el pijama. Esto nos ayudará a identificar el tiempo de trabajo con el de descanso, aunque tenga cierto efecto placebo. Evitar el silencio absoluto es otra estrategia a seguir. En ocasiones será necesario para no distraerte, pero la música o la radio ayudan a romper el aislamiento.
La soledad del autónomo es algo muy serio. Puede lastrar tu productividad, impidiendo el desarrollo de tu proyecto con éxito. Contar con el apoyo de terceros, compartir tus experiencias con familia y amigos, te ayudará a superar los momentos más duros. Una buena red social es el mejor apoyo para cualquier autónomo. Aprovéchala también para celebrar tus éxitos junto a quienes te han apoyado en los momentos más duros de tu trayectoria.