Una vez se acerca el momento de la jubilación, lo más frecuente es que surjan algunas dudas al respecto. Y es que, los últimos años de la etapa profesional despiertan ciertas inquietudes en los trabajadores acerca de su futuro y la calidad de vida que les espera cuando dejen de trabajar en activo.
En el caso de los autónomos, esta situación supone una gran preocupación. Por ello, no es de extrañar que sea necesario obtener más información sobre las diferentes modalidades de jubilación y cuáles son más adecuadas según cada persona.
Otro aspecto a destacar es que las pensiones de los autónomos, si eligieron cotizar por bases bajas, son mucho más reducidas que las de los empleados por cuenta ajena. Por este motivo, optar por alternativas como un plan de pensiones es bastante recomendable.
Si estás pensando en contratar este producto financiero y ahorrar de cara a tu futuro, los planes de jubilación de Mapfre te ofrecerán muchas ventajas.
Por ello, a continuación repasamos cuáles son los diferentes tipos de jubilación para que escojas la opción que mejor encaja con tu situación. ¡Toma nota y resuelve todas tus dudas!
Conoce las diferentes modalidades de jubilación
No todas las personas deben afrontar su jubilación de la misma forma. Existen, por tanto, varias alternativas a las que una persona se puede acoger en función de sus objetivos o necesidades. Estas son las diferentes modalidades de jubilación que existen en la actualidad:
Jubilación ordinaria
Este es el tipo de jubilación recomendada para aquellos profesionales que cumplen con la edad y los años de cotización pertinentes. En España, hablamos de 65 años si llegada esa edad, se han cotizado al menos 38 años y 6 meses. Sino, la edad ordinaria se puede retrasar hasta los 67 años.
A su vez, cabe mencionar que la cotización para acceder al 100% de la base reguladora será como mínimo de 37 años. Señalar que para tener derecho a la pensión de jubilación se requiere de un mínimo de 15 años cotizados, siempre que haya al menos 2 años cotizados entre los últimos 15. De esta manera, se tiene derecho a acceder al 50% de la base reguladora.
Jubilación anticipada
La jubilación anticipada hace referencia a aquellas jubilaciones que se encuentran por debajo de la edad ordinaria. Dentro de esta opción, se dan dos variantes: la voluntaria y la involuntaria. Ambas representan un porcentaje elevado de las jubilaciones en España.
- Voluntaria: Ocurre cuando el trabajador quiere jubilarse de forma previa a la edad pertinente. Solo puede hacerse, como máximo, dos años antes de la ordinaria. Además, está sujeta a coeficientes reductores en la cuota de pensión.
- Involuntaria: Suele ser consecuencia de un despido y admite una anticipación de hasta 4 años. Se trata de un tipo de jubilación que también está afectada por coeficientes reductores, pero ligeramente menores que la voluntaria.
Jubilación demorada
Esta es la jubilación a la que se accede de forma demorada. Es decir, de forma posterior a la edad ordinaria. Por tanto, cuenta con una serie de beneficios a través de porcentajes que se suman a la base reguladora en función de los años de cotización obtenidos.
No obstante, no es una de las alternativas más populares por parte de la población.
Jubilación parcial
Hace referencia a la jubilación en la que se empieza a cobrar la pensión al mismo tiempo que se obtiene un sueldo como trabajador en una empresa en la que se realiza una actividad laboral de forma parcial.
La cuantía de la pensión es el resultado de aplicar el porcentaje de reducción de la jornada laboral (entre el 25% y el 75%) al importe de la pensión que le correspondería al trabajador si se jubilara en ese momento, sin aplicar las reducciones por jubilación anticipada.
Jubilación flexible
Similar a esta, encontramos la jubilación flexible. La diferencia entre ellas es que esta alternativa está enfocada a aquellos jubilados que cobran el 50% de su pensión y siguen trabajando como si siguieran en activo.
Complementar tu pensión
Pese a que ya conoces todas las modalidades de jubilación, aún supone una elevada incertidumbre. Esto se debe a que la legislación está siempre expuesta a cambios que pueden alterar notablemente la cuantía de pensión que se reciba.
De este modo, son muchos autónomos los que se decantan por un plan de jubilación o un plan de pensiones para incrementar su calidad de vida tras su actividad laboral.
Plan de jubilación
El principal objetivo de este producto es complementar la pensión a través de un seguro de ahorro contratado a través de una aseguradora.
Plan de pensiones
Al contrario, un plan de pensiones es un producto financiero que consiste en depositar una determinada cantidad para invertir a largo plazo con la intención de incrementar el ahorro y la rentabilidad de cara a la futura jubilación.
En definitiva, lo importante es pensar en tu futuro y decidir la mejor opción para disfrutar de una mejor calidad de vida una vez llegada la jubilación.