La gestión laboral de una empresa se compone de sistemas de atracción, preselección y selección del personal. También hay que tener en cuenta la tramitación de los contratos de trabajo y valorar si los empleados necesitan formación.
A su vez, en el caso de los autónomos, su figura profesional debe saber llevar las nóminas, las retenciones y, cuando tiene lugar un despido, los finiquitos. Estos son solo algunos de los ejemplos más significativos de la gestión laboral. Por ello, si trabajas como autónomo y no conoces cuáles son estas principales gestiones, lo más recomendable es realizar un curso de nóminas y seguros sociales. En el artículo de hoy, ¡te explicamos cuáles son los trámites de gestión laboral más frecuentes!
Principales trámites de la gestión laboral
Los principales trámites relacionados con los trabajadores que los autónomos deben tener en cuenta son los siguientes:
Inscripción de la empresa
Antes de contratar trabajadores, el autónomo debe inscribir a la empresa en la Tesorería General de la Seguridad Social. Esta asignará a la empresa un número de identificación que se conoce como Código de Cuenta de Cotización Principal.
Este número sirve para identificar y controlar las obligaciones de la empresa dentro del Régimen del Sistema de la Seguridad Social. Antes de solicitar el Código de Cuenta de Cotización Principal, se tienen que solicitar otros secundarios. Uno de ellos es el Código de Cuenta de Cotización de cada una de las provincias donde se ejecute la actividad laboral. El otro, solo si es necesario, es identificar los trabajadores con peculiaridades en su cotización.
Afiliación de trabajadores
Aquellas personas que vayan a comenzar una actividad laboral deberán solicitar un número de afiliación (NAF). Este número es único y sirve para todos los Regímenes del Sistema. Lo puede solicitar el propio empresario o el trabajador al iniciar su actividad. Si esto se incumple tras una inspección de trabajo, las Direcciones Provinciales de la Tesorería General de la Seguridad Social o Administraciones lo efectuarán de oficio.
Alta de los trabajadores en el Régimen de la Seguridad Social
El autónomo deberá dar de alta a sus trabajadores en el Régimen de la Seguridad Social que corresponda. Este alta permite una relación jurídica con la Seguridad Social. En este sentido, el empresario y el trabajador se responsabilizan de efectuar las aportaciones económicas al sistema. Esto les concede el derecho a recibir prestaciones tanto sanitarias como económicas dependiendo la situación laboral del trabajador.
Concretamente, el encargado de dar el alta al trabajador es el propio empresario, aunque puede realizarlo el trabajador si el empresario incumple su obligación. A su vez, también puede realizarlo la propia administración si al realizar una inspección comprueba que se incumple el ingreso de los trabajadores. En este caso, el organismo encargado de este trámite es la Tesorería General de la Seguridad Social.
Alta de los contratos de trabajo
Este procedimiento tiene el objetivo de legalizar o dar de alta los contratos de los trabajadores por cuenta ajena. El organismo encargado de este trámite es el Servicio Público de Empleo Estatal.
Comunicación de apertura del centro de trabajo
Constituida la empresa, el empresario deberá comunicar la apertura a la Consejería de Trabajo de la Comunidad Autónoma. Esto permite tener un mayor control de la seguridad y de la salud laboral de los trabajadores de dicha empresa. Para ello, el empresario debe proceder a la continua identificación, evaluación y control de los riesgos de los puestos de trabajo.
Una vez se conocen los principales riesgos, el siguiente paso es tomar medidas y crear un plan de prevención de riesgos laborales, el cual el empresario se compromete a implantar y aplicar.
Obtención del calendario laboral
Las empresas tienen que exponer el calendario laboral. En dicho calendario, figuran las horas y los días laborables, los festivos y los descansos semanales. El organismo encargado de este calendario es la Inspección Provincial del Trabajo.
Como ves, el orden de los factores si altera el «proceso». Por ello, es fundamental conocer todos estos procedimientos para realizar una buena gestión y que la empresa funcione de forma adecuada en el ámbito laboral.