Si deseas iniciar un negocio de compra y venta de bienes entre países extranjeros, deberás conocer qué hacer para contabilizar una importación correctamente y evitar disgustos por parte de la Agencia Tributaria, de cara a irregularidades en el proceso. Es por esto que la contabilidad de los autónomos debe llevarse al milímetro si no queremos tener problemas.
Se entiende por importación, la adquisición de bienes en las que intervengan países que formen parte del comercio internacional, situados en un territorio al margen del régimen general del IVA. En este sentido, serán importaciones las transacciones con países “terceros”, incluyendo además a Ceuta, Canarias y Melilla.
Un aspecto inicial que debes tener en cuenta si eres autónomo, es que en el caso de las importaciones, la liquidación del IVA se realiza al mismo tiempo que los derechos arancelarios, en las instalaciones de la Aduana. Esta es una de las principales diferencias con respecto al IVA de las operaciones comerciales generales.
En ocasiones además, es posible que sea el Agente de Aduanas (también conocido como transitario) el que se encargue de realizar el pago en la aduana en nombre del responsable de la mercancía.
Eso sí, al instante de realizar el devengo del IVA en la importación, se instituirá el derecho a la deducción de la cuota soportada. El proceso se llevará a cabo con la presentación del modelo 303 de la autoliquidación periódica, durante el trimestre en el que haya tenido lugar la importación.
Pago diferido del IVA en importaciones
Tras las últimas actualizaciones en la Ley del IVA, de acuerdo con lo expuesto en el apartado 2 del artículo 167, es posible realizar el pago diferido del IVA en las importaciones. De este modo, el contribuyente podrá declarar en la liquidación periódica del IVA, el importe relativo a la cuota de IVA devengada y a su deducción por el trámite de importación.
Conoce toda la información disponible sobre el IVA de autónomos y sus características.