Una de las dudas más frecuentes por parte de los trabajadores autónomos es la posibilidad de darse de baja de la cuota de la seguridad social durante el periodo de vacaciones.
¿Me doy de baja como autónomo en verano o en Navidad? Durante los períodos de descanso, el trabajador independiente no percibe ninguna remuneración para afrontar los costes que conlleva el mantenimiento de su negocio. Esto provoca que muchos profesionales opten finalmente por dejar de pagar las cuotas de autónomos mensuales asociadas al negocio.
Sin embargo, muchas veces surge la duda de la baja temporal de autónomos por inactividad, ¿es esta la mejor opción de cara las cotizaciones de la seguridad social? ¿puede un autónomo darse de baja por vacaciones?
Afrontar las vacaciones como autónomo no supone una desconexión total nunca, sin embargo, es una pausa necesaria para recargar la energía y las fuerzas.
Darse de baja como autónomo en vacaciones
La seguridad social tiene una respuesta muy clara ante esta cuestión.
Darse de baja como autónomo en vacaciones no es una buena alternativa, porque el profesional pierde la antigüedad en relación a las bonificaciones para autonomos, cotización de la Seguridad Social, prestaciones o reducciones en la tasa.
Por ejemplo, tal es el caso de lo que sucede al solicitar el subsidio incapacidad temporal, para la que se necesita haber realizado aportaciones a la Seguridad Social durante 180 días como mínimo, en el periodo comprendido por los cinco años anteriores a la solicitud.
Algo similar sucede en el caso de los autónomos que están disfrutando de la bonificación de la Seguridad Social gracias a la tarifa plana de 60 €. En este caso el profesional también perdería la antigüedad y por tanto, la posibilidad de seguir recibiendo la sucesivas bonificaciones en las siguientes cuotas.
Además tampoco podrás deducirte el IVA ni los gastos en concepto de IRPF.
Si crees que tu negocio no obtiene tanto beneficio como para poder mantenerlo durante vacaciones, quizás resultaría más adecuado realizar un análisis para identificar dónde puede estar el problema a nivel de rentabilidad, para tomar medidas económicas que de verdad supongan un beneficio para la empresa.
Darse de baja como autónomo en vacaciones , ya sea en agosto o en los meses de Navidad, debe ser la última opción, como medida drástica para evitar generar deuda con el negocio. No obstante, es una elección que debe ser meditada y reflexionada antes de optar por esta vía.
Si decides darte de baja de autónomo un mes de vacaciones es posible que lo hagas porque te compensa al estar en sector estacional y la actividad empresarial está centrada en 5 o 6 meses del año, mientras que el resto del año no se trabaja lo suficiente. En los demás casos pierdes demasiadas ventajas como la tarifa plana o las deducciones que no compensan.