El número de pensionistas autónomos en España asciende a 1.935.282, que suponen 1.600 más respecto a finales de diciembre de 2015. Según los datos publicados por la Seguridad Social, en los primeros cuatro meses de este año ha crecido en 2,30 euros la pensión media, mientras que el coste de las pensiones de los trabajadores por cuenta propia pasa de los 1.209 millones mensuales a los 1.215.
La pensión media de jubilación de los profesionales autónomos continúa siendo muy baja en comparación con la de los trabajadores del Régimen General, que alcanzan los 996 euros frente a los 692 euros de los primeros.
Desde la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos aprecian que existe una ralentización en lo que se refiere a la evolución de los nuevos pensionistas, que sitúan en torno al 2%. En lo que se refiere a las jubilaciones, los incrementos de este año se encuentran de momento en el 0,93%, cuando en 2012 se alcanzó el 2,7% y en 2014 el 1,40%, según recoge UPTA.
El secretario general de esta organización de autónomos, Eduardo Abad, considera que este freno es producto de los “efectos de la Reforma de Pensiones que retrasa la edad de jubilación”, además de causas económicas que obligan en cierta manera a muchos autónomos a continuar trabajando para asegurarse de esa manera unas mayores rentas a la hora de retirarse.
Como vienen reclamando algunas organizaciones desde hace tiempo, el propio Eduardo Abad insiste en la necesidad de afrontar cambios en el sistema de cotización con el propósito de “mejorar los resultados financieros del sistema y la medida de proyección social del colectivo”. Para ello sería conveniente implantar una reforma que incluyese, entre otras cosas, la cotización en función de los ingresos, para que aquellas personas que más ganasen pudiesen disfrutar de una mayor pensión en el momento de su retirada. Una cotización progresiva sería una estupenda opción para este colectivo.