Durante la última década, las mujeres han desempeñado un papel muy importante en el sector de los autónomos. En este tiempo, con una crisis de por medio, han incrementado su presencia en casi un 12%, según los datos de la Federación de Organizaciones de Profesionales, Autónomos y Emprendedores (OPA), tomando como referencia los datos de la Seguridad Social.
En marzo de 2006 había inscritas en el RETA 984.696 mujeres, mientras que en marzo pasado esta cifra se elevaba hasta las 1.117.265. Esto supone un crecimiento de 132.569 profesionales que se han dado de alta como autónomos.
En el lado opuesto de la balanza se encuentran los hombres, que han visto como en esta década han perdido 47.773 trabajadores por cuenta propia, al pasar de 2.102.698 autónomos de marzo de 2006 a los 2.054.925 de marzo de este año. La caída es del 2,8%. De alguna manera se puede asegurar que las mujeres han conseguido mantener unas buenas cifras en cuanto a afiliación en el régimen de autónomos.
En este tiempo han soportado una mayor resistencia a la crisis económica que golpeó con fuerza al país y ya suponen, como destaca el presidente de OPA, Camilo Abiétar, el “35,3% del total de autónomos que hay en España”, por lo que uno de cada tres afiliados en el régimen de los trabajadores por cuenta propia son mujeres.
Abiétar señala que “están resistiendo con mayor entereza la actual coyuntura“. Analizando este estudio en función de las comunidades se aprecia que Andalucía es la que ha sufrido una mayor subida en estos últimos diez años, al sumar casi el 22% de lo sumado por el conjunto del país, que representan unas 29.034 profesionales. A continuación le siguen Galicia y Comunidad de Madrid, que han ganado en este periodo 20.490 ý 16.462 nuevas mujeres autónomas, respectivamente.
Muchas de estas mujeres se han visto obligadas a optar por el autoempleo después de quedarse en el paro o como solución a los problemas para acceder al mercado laboral.