El emprendedor español es el más que más dinero de su patrimonio personal destina a su negocio, en concreto el 32,2, y además el primero que comienza a emprender si se compara con otros países del entorno. Es lo que recoge un informe elaborado por BNP Paribas.
Dentro de los países de la Eurozona, los emprendedores de España son los que presentan unas mayores expectativas de rentabilidad a largo plazo. Casi tres de cada cuatro (73,1%) confía en conseguir beneficios, mientras que de media tienen un objetivo de margen bruto de beneficios del 28,5%. Este estudio demuestra la aparición de una nueva generación de emprendedores denominada ‘millennials’. Hace referencia a los jóvenes nacidos entre 1980 y 1995 y se presentan totalmente renovados respecto a los emprendedores de antes.
El consejero delegado de BNP Paribas Wealth Management, Vincent Lecomte, asegura que en la actualidad crean más empresas “con un mayor número de trabajadores y con mayores objetivos de beneficios”. Tienen un especial interés por la nueva economía, pero sin rechazar a los sectores tradicionales como la contabilidad, el derecho o el comercio minorista.
En este estudio también se hacen eco del papel de la mujer emprendedora. La encuentran más ambiciosa que los hombres, y además con mayor éxito en los negocios. El enfoque de emprendimiento que tienen es totalmente diferente en relación a la financiación, liderazgo y objetivos. Según se desprende de este informe, las españolas son junto con las polacas y las chinas las emprendedoras que presentan una mayor tasa de actividad en el mundo.
El perfil del emprendedor de éxito que dibuja BNP Paribas es el de un hombre que ronda los 31 años, que destina una quinta parte de su patrimonio a los negocios y cuyo negocio principal llega a facturar unos 5,9 millones de euros al año. Se aprecia en el estudio que las nuevas generaciones vienen pisando con fuerza. El 32% de los nuevos emprendedores cuenta con menos de 35 años.